Mediado el otoño, ha
llegado la hora de hacer balance y comentar las últimas novedades literarias.
Lo primero de todo es que
he entrado a formar parte de Nocte,
la Asociación Española de Escritores de Terror. Aquí anda mi humilde nombre,
junto a novelistas de la talla de Víctor Conde o David Jasso. No sé si Nocte
indica profesionalización (no sé si en literatura hay algo que lo
indique, más allá del saldo de la cuenta corriente a fin de mes), pero
desde luego lo que sí indica es profesionalidad, y me hace mucha ilusión estar
entre sus filas. Llego con ganas de hacer cosas en la asociación y de
implicarme mucho en los proyectos que se vayan planteando.Veremos si las
circunstancias y la distancia me lo permiten.
En lo estrictamente
literario, ya anuncié por las redes sociales que dos relatos nuevos van a salir
pronto a la luz.
El primero de ellos es Águilas y gorriones, que fue seleccionado en el segundo concurso Alambre
de Letras de la editorial Neonauta. La idea de este proyecto era recopilar varias
historias sobre la Segunda Guerra Mundial con un toque dieselpunk, o new weird,
o simplemente con algún detalle fantástico.
El anterior Alambre de Letras, que Neonauta publicó
el año pasado, hacía lo propio con la Primera Guerra Mundial. En esa antología
tuvieron cabida dioses, demonios, lobos sobrenaturales y tecnología steampunk. La edición contaba con
ilustraciones de Mikel Bao en blanco
y negro, y una edición maravillosa, con cantos redondeados y un formato muy
atractivo, como podéis ver abajo.
Una preciosidad y una
auténtica rareza en el mundo del small
press.
El segundo relato se
llama Canciones de cuna para lobas
tristes, y creo que es el mejor nombre que le he puesto a algo hasta la
fecha (aunque el nombre de este poema le anda cerca). Fue seleccionado en la convocatoria “Licántropas y metamorfas” de la editorial
Café con Leche. En cuanto leí las bases, no tuve ninguna duda de que tenía que
participar. La idea es que el libro esté disponible para
Halloween, al menos en formato digital, así que iré informando por los canales
habituales.
Por último, hace un par
de semanas las editoras de Triadæ
Magazine decidieron que mi poema “La piñata” era merecedor de aparecer en
el número cuatro de su revista digital. La revista está maquetada e
ilustrada con mucho cariño, y tiene un montón de relatos y de poemas que
merecen la pena. Lo mejor de todo es que no solo dan voz a los
hispanohablantes, sino que también traducen a autores extranjeros, dándonos la
oportunidad de conocer voces nuevas.
Es el primer poema que me
publican, y no puedo hacer menos que darles las gracias por cederme un espacio.
¿Más? Pues sí. Hace poco
el editor de NowEvolution nos
informaba que van a sacar una segunda
edición de Quasar, la antología
de Ciencia Ficción hard (que todo el
mundo dice que mola mucho pero que no es hard)
en la que colaboré con mi relato Paradise
City. Una segunda edición es toda una proeza en los tiempos que corren, así
que muchas gracias a todos los que habéis comprado la antología; si alguno vio
alguna errata, o algo que le sonó raro, que me envíe un correo electrónico y se
lo paso a la editorial para que haga las correcciones necesarias.
Con estas publicaciones (y
alguna otra sorpresa que puede darnos el año nuevo), creo que voy a retirarme
de los concursos de relatos durante algún tiempo para centrarme
en otros proyectos que ya están en marcha, pero de los que todavía no puedo
soltar prenda.
Vamos a por la novela...
Me alegran esas buenas noticias! Enhorabuena por todas!
ResponderEliminar¡Muchas gracias, Marian! :-)
EliminarEnhorabuena. El trabajo continuado va teniendo su recompensa. Te lo mereces.
ResponderEliminar¡Gracias!
EliminarEs tan gratificante cuando el trabajo es valorado :-). Me alegran tus recompensas. Para mí cada avance, y cada "pertenezco a..." tienen un inmenso valor. Cada uno conoce su esfuerzo. ¡Felicidades!
ResponderEliminar¡Muchas gracias! Como bien dices, cada pequeño hito importa. ¡Un saludo!
Eliminar